Otras micosis sistémicas
La esporotricosis es una infección producida por el hongo dimorfo Sporothrix schenckii. Este microorganismo vive sobre restos de vegetales y en la tierra, e infecta al hombre por las vías cutánea e inhalatoria. La mayor parte de los casos se produce por infección cutánea, en personas inmunocompetentes y origina lesiones fijas de la piel o un síndrome linfangítico nodular muy característico. Las formas diseminadas, con lesiones viscerales, se asocian a deficiencias de la inmunidad mediada por células y a la penetración del hongo por vía inhalatoria (34, 36).
La esporotricosis es una complicación rara del SIDA. En estos pacientes adopta la forma cutánea diseminada o la forma sistémica con lesiones viscerales. Los síntomas más comunes son fiebre prolongada, astenia, pérdida de peso, anemia, tos, disnea y lesiones cutáneas papulosas o nodulares que se ulceran en el vértice. La radiología pulmonar muestra micronódulos diseminados (43, 66).
El diagnóstico se lleva a cabo por el hallazgo de S. schenckii en el examen microscópico directo de las escarificaciones o biopsias cutáneas, así como por el aislamiento de este microorganismo en hemocultivos, lavados broncoalveolares y muestras obtenidas por punción-aspiración. El examen histopatológico puede proporcionar una ayuda valiosa para el diagnóstico. La anfotericina B intravenosa es el tratamiento de elección.
Las cigomicosis han sido muy raras en pacientes con SIDA. Sus agentes causales son hongos del orden Mucorales, especialmente de los géneros Rhizopus y Absidia. Produjeron focos de cerebritis en adictos a drogas por vía parenteral y neumonías excavadas. La mayor parte de los enfermos había sufrido episodios de leucopenia por el propio HIV o por tratamientos, tales como: ziduvidina, cotrimoxazol, etc. Su diagnóstico debe ser tenido en cuenta en neumopatías refractarias al tratamiento con antibióticos, que se presentan en enfermos neutropénicos. Los microorganismos causales se aislan en los lavados broncoalveolares. El tratamiento de elección es la anfotericina B (66).
Se han encontrado
pocos casos de feohifomicosis subcutáneas de aspecto seudoquístico,
debidas a los géneros Alternaria, Bipolaris y Curvularia.
Todos los pacientes eran adictos a drogas por vía parenteral.