Louis Pasteur

Louis Pasteur nació en1822 en Dole, pequeña ciudad de la Región de Jura, Francia. Murió en 1895 en Villeneuve-l'Étang, cerca de París. Contribuyó con su visión creadora y fortaleza espiritual en el inicio de nuevos campos del conocimiento que llevaron a la transformación del pensamiento científico universal y proporcionaron enormes beneficios a la humanidad entera.

Aunque Pasteur demostró gran talento para las artes plásticas, estudió y se dedicó por entero a las ciencias. Recibió el doctorado en 1847, dedicándose a la enseñanza de la química en la Universidad de Estrasburgo. En 1854 fue nombrado Decano de la nueva Facultad de Ciencias de la Universidad de Lille, donde estudió la fermentación del ácido láctico, abriendo el camino para el desarrollo de la Microbiología. En 1857 asume el cargo de Director de la Escuela Normal Superior de París y continúa trabajando en el laboratorio. En 1860 publica su memoria sobre la fermentación alcohólica y establece que los microorganismos pueden vivir y reproducirse en ausencia de oxigeno libre, y que las levaduras pueden vivir tanto en condiciones aeróbicas como anaeróbicas.

En 1861 pone punto final a la larga controversia sobre la generación espontánea. Mediante experimentos sencillos y fáciles de reproducir demostró que los microorganismos presentes en el aire, y no otros mecanismos, eran los únicos responsables de la alteración de los cultivos y del desarrollo de la vida. Pasteur no hacía distinciones entre ciencia pura y aplicada, buscaba siempre darle respuesta científica y soluciones prácticas a los problemas que afectaban al hombre y su entorno. En 1866 estudió la alteración de los vinos, demostrando la contaminación de las levaduras con organismos ácido-productores. En 1870 se dedica a estudiar las enfermedades que afectaban la cría del gusano de seda, y más tarde a buscar la forma de prevenir enfermedades que afectaban a animales y al hombre.

A partir de 1880 trabajó en la elaboración de vacunas contra el cólera aviar y el ántrax. En Poully-le-Fort demostró al mundo la efectividad del método de vacunación y sentó las bases de la inmunología. En 1885 Pasteur anunció ante la Academia de Ciencias el método para prevenir el desarrollo de la rabia en personas mordidas por perros infectados, y alcanza la cima de su carrera académica en la cual había obtenido numerosos reconocimientos. En 1888 se inaugura el Instituto Pasteur de París, construido por suscripción internacional y el aporte del gobierno, dedicado fundamentalmente a la seroterapia y a la investigación científica.