Efectos "Genómicos" del Receptor de Estrógeno

La teoría clásica de acción de las hormonas esteroideas establece que el receptor esteroideo, es activado al unir su ligando, en este caso el estradiol 17-b (E2), y actúa como un factor transcripcional al unirse al ADN estimulando la transcripción de ciertos genes, de ahí el nombre de receptores nucleares, ya que ejercen su acción a nivel del núcleo (7,15). Este modo de acción de los esteroides ha sido denominado "genómico" (16) ya que requiere la activación del receptor al unir su hormona específica después de haber atravesado la membrana, la homo o heterodimerización (dos RE-a o un RE-a se heterodimeriza con un RE-b) del complejo hormona-receptor y el reconocimiento de una secuencia especifica en el ADN o elemento de respuesta a estrógeno (ERE) (17)(Figura 2). En consecuencia, el proceso de transcripción es activado al formarse el complejo de iniciación de la transcripción que incluye diferentes co-activadores, co-represores y proteínas reguladoras de la transcripción.

La transcripción estimulada por el RE es finamente regulada dependiendo del tejido donde ocurre. Este control tan específico parece depender de la composición del complejo de iniciación de la transcripción (figura 3) (18). Un grupo de factores transcripcionales basales interactúa con el complejo hormona-receptor para formar un complejo de preiniciación al cual se le van a unir una serie de proteínas co-reguladoras llamadas proteínas de interacción con receptores o RIPs (Receptor Interacting Proteins). Estos co-reguladores pueden activar (co-activadoras) o represar (co-represoras) la transcripción. Este proceso, donde se induce la síntesis de ARN que resulta en la producción final de nuevas proteínas, requiere usualmente de por lo menos 1-2 horas después de iniciado el tratamiento con la hormona (Figura 4).