Introducción
Existen datos realmente preocupantes sobre la falta de valoración de los pies en el diabético. En la obra Diabetes in America, se puede leer que a un 53% de los diabéticos no se les había realizado exploración de sus pies en los últimos 6 meses. Litzelman et al demostraron en un estudio controlado y randomizado que los pacientes cuyos pies eran examinados por sus médicos, tenían menos probabilidad de sufrir lesiones serias que los que no recibían esta atención. Por tanto sorprenden estos porcentajes y más cuando se conoce que se trata de un exámen fácil de realizar, que no ocupa un tiempo excesivo, que se realiza con unos instrumentos baratos, y sobre todo cuando se conocen las dramáticas consecuencias de esta complicación.
Figura
1 Desbridemiento importante debido a una infección
necrotizante en un intento de salvar la pierna del
paciente. |
Foto Dr. Javier Aragón Sánchez. Diabetic Foot Collection |
Los tres componentes que hacen al pie del diabético susceptible de padecer graves lesiones son la neuropatía, la enfermedad vascular periférica y la infección. La clave para llegar a tratar de forma adecuada la lesión del pie diabético es la identificación de los elementos etiopatogénicos que participan en la lesión. Entre un 60-70 % de las lesiones son neuropáticas, un 15-20% isquémicas y un 15-20% mixtas. Vemos que la neuropatía está presente en un elevado porcentaje de casos y que la isquemia no es siempre el componente predominante. Por tanto debemos evitar la clásica concepción de que pie diabético equivale a pie isquémico ya que ello conduce a pesimismo y a pensar que la amputación será inevitable.
Un adecuado conocimiento de cada uno de estos elementos así como su exploración es fundamental para llegar a filiar la lesión que presenta nuestro paciente. El objetivo de esta revisión es el de aportar una secuencia diagnóstica al médico que se enfrenta al pie diabético para llegar a un diagnóstico etiopatogénico de la lesión lo más preciso posible. Sólo de esta manera podremos aplicar terapeuticas bien dirigidas y con altas probabilidades de éxito.
Las mismas exploraciones pueden ser realizadas en el diabético sin lesiones con objeto de catalogar el "pie de riesgo" que es aquel que presenta anomalias estructurales y/o funcionales que lo hacen tener más probabilidades de lesión.